EXPERIENCIAS

Los ayuntamientos gestionan directamente los comedores de los centros escolares de educación primaria (3-12 años). En algunos municipios existen cocinas municipales y, en otros, los centros tienen cocinas in situ. En todos los casos, el personal laboral es municipal y se divide en tres tipos: cocineros y cocineras, monitores/as de comedor y educadores/as para los espacios de después de comer. Las familias pagan alrededor de 5€ por menú, o menos, dependiendo de su renta.

Un trabajador o trabajadora del ayuntamiento se encarga de la coordinación entre la escuela y el ayuntamiento, y recurre a personas expertas externas cuando se requiere (dietistas, entre otros). En la comisión del comedor participa el personal laboral, los padres y las madres y la dirección.

Los collège (12-16 años) se gestionan desde los departamentos (provincias). En los liceos (16-18 años) la gestión del comedor queda en manos de la región.

Gestión de comedores en Angelu

El ayuntamiento de Angelu gestiona 14 escuelas y dos centros de ocio. Todos ellos cuentan con una cocina, en el propio edificio o en uno cercano. La empresa Sogeres se encarga del abastecimiento de alimentos, ya que resultó ser la empresa ganadora en el concurso público al que se presentaron un total de 3 empresas.

La empresa tiene que cumplir las condiciones exigidas por el ayuntamiento, por lo que el 50% del pescado es fresco, y el 70% de las verduras y el 100% de los lácteos es ecológico. Desde octubre una ley francesa dictamina que en la compra pública de alimentos el 20% de los productos tiene que ser ecológico y el 50% productos locales o de calidad (con label). En la región de Nueva Aquitania el 20% de los productos de los comedores colectivos tiene que ser ecológicos.

Las familias pagan cuotas de entre 0,50 céntimos hasta 4,5€.

El aspecto pedagógico tiene mucha importancia, por ese motivo, cuidan la ergonomía de los espacios, niños y niñas de diferentes edades comparten mesa, y el alumnado de una edad más avanzada ayuda a los más jóvenes a cortar la comida.

Instituto de Donibane Garazi

El Lycée Navarre es pionero en lo que a gestión sostenible del comedor se refiere.

Es miembro de la asociación Acena, que agrupa a diferentes instituciones y centros escolares para realizar las compras alimentarias de forma conjunta. La restauración colectiva que integra esta asociación ofrece 57 millones de menús al año. La asociación reúne 328 colegios, 203 liceos y 31 liceos agrícolas. Dividen las compras en 20 grupos y consiguen buenos precios, además de influir en las compras de las grandes empresas.

Para que en los comedores colectivos se promueva el uso de productos locales, es primordial conocer la producción local, así como la capacidad de producción y las veces que puede dar servicio cada productor. Además, se realizan reuniones con las y los productores a la hora de preparar las licitaciones, para explicarles cómo tienen que presentarse.

Se otorga gran importancia al ámbito pedagógico. Llevan al alumnado a conocer a los productores y productoras, a sembrar y a recoger la fruta. Los productores/as también visitan los centros escolares y el alumnado tiene la posibilidad de hacerles preguntas. Para conocer la influencia del cambio climático, visitan los glaciares de los Pirineos con personas expertas. Por otro lado, las cocineras y los cocineros reciben formación, para aprender cómo trabajar con productos frescos.

En Iparralde, el precio conlleva solo el 30% del peso en una licitación y esto posibilita que los agricultores/as, ganaderos/as y productores artesanos/as locales introduzcan sus productos en la restauración colectiva.

Fuente: https://www.gureplateragureaukera.eus/es/iparraldeko-eskola-jantokiak-bisita-baten-kronika/